La promoción de obra nueva en la Costa Brava en cuestión se halla a 600m del mar. Se puede llegar andando a la cala en tan sólo 10 minutos por el camí Vell de Sa Tuna. De un total de 24 viviendas de entre 184 y 186m2 hay actualmente 3 casas en venta. Todas las casas tienen jardín y parking y los vecinos tienen la suerte de contar con una preciosa zona comunitaria con una piscina tipo infinity pool; que produce el efecto visual de que el agua se extiende hasta el horizonte, o desaparece en el infinito, de ahí su nombre.
Cada una de las casas en comercialización tiene su distribución, son ligeramente diferentes, aunque siempre vienen equipadas con climatización de frio y calor. La primera, terminada en 2009, tiene los acabados típicos de la época, de calidad y con esa calidez propia de la costa. Es la única con cocina independiente. En la intimidad de la planta baja hay 2 habitaciones dobles y un baño. En cambio arriba, hay una doble y una simple, la mencionada cocina, el baño de día y un precioso salón comedor amplio y luminoso con vistas de ensueño.
La segunda casa se le parece mucho pero los suelos son de micro cemento y la cocina es americana, con una campana extractora de techo en isla.
Estas peculiaridades se repiten en la tercera vivienda que, además, agrupa las 4 habitaciones en la planta inferior, todas dobles.
En relación a la calidad estas casas resultan muy económicas: oscilan entre 495.000 y 595.000 euros.